• Músico potosino es víctima de ola de robos en el Centro Histórico.

José de Jesús Méndez Acuña, es un nombre que podría pasar desapercibido en la memoria colectiva potosina, pero su legado artístico se vincula con su sobrenombre: El Búho; guitarrista prodigioso que compartió escenario con Carlos Santana y otros renombrados artistas.

Pero la vida de un guitarrista siempre estará ligada a una cosa: su guitarra. Los músicos de renombre cuentan con patrocinios y acceso a los mejores instrumentos y tecnologías para lograr un sonido único, pero… los guitarristas tienen en su mente y corazón lograr los sonidos cremosos y valvulares que producían su talento, y las guitarras y amplificadores antiguos, los que saben bien, saben que entre más antiguos mejor.

Orville Gibson fundó en 1894 en Nashville Tennessee una de las empresas más legendarias y representativas de la industria musical que lleva su nombre. Pero la historia le debe su éxito a Lester William Polfuss, mejor conocido como Les Paul, quien diseño para la marca una de las guitarras que cambiarían no solo la música, sino a toda la sociedad.

El Búho se mudó de San Luis Potosí a Chicago desde muy joven. Ahí, compró su primera y única guitarra: una Gibson Les Paul Custom, considerada como uno de los más refinados instrumentos y, además, costoso.

Con apenas 20 años persiguió su sueño musical, y lo logró. En su estadía en aquella cuidad norteamericana aprendió de grandes jazzistas y bluseros, además de que vivió la época donde la música se caracterizaba por un alto sentido de la personalidad con tendencias como Earth, Wind and Fire que revolucionaron la década de los setentas.

Después de compartir grandes escenarios y a sus 71 años, ahora se dedica a alegrar el camino de los potosinos en el Centro Histórico, muchos los debemos recordar por tocar Ghost Riders in the Sky de Stan Jones, un clásico western que nos recuerda inmediatamente a Johnny Cash.

Pero no todo son recuerdos de éxito, en un momento, cuando apenas se distrajo por unos minutos, una persona le robó su antigua guitarra cuando solo se detuvo por unos instantes a comprar un celular en una tienda de pasaje Zaragoza.

El músico compartió para Potosí News los sentimientos que representan la perdida de su guitarra en una entrevista

Potosí News– Platícame que pasó con tu guitarra.

El Búho– Pues me la robaron. Un día me metí aquí a comprar en una tienda llamada Digitech aquí en la de Zaragoza un celular, la dejé como un minuto y cuando salí ya no había ni guitarra, ni aparato, ni nada.

Me llamó una señora y me dijo que ella la tenía y que me la quería regresar, pero seguramente alguien la mal aconsejó y ya no me entregó nada. La he buscado incesantemente y tengo su teléfono que es muy fácil de nombrar 444 558 8676, pero ya no, nunca supe la procedencia de la señora ni nada.

Potosí News – Platícame la historia de esa guitarra.

El Búho – La traje desde Chicago, era una guitarra excelente marca Gibson Les Paul modelo Custom y fue mi compañera durante 50 años, un día de repente ya no la vi; me he sentido muy triste, para mi fue una perdida tremenda y no tanto por su valor sino por lo que representaba sentimentalmente, y esa fue la triste historia de mi guitarra.

Potosí News – Tocaste con ella con grandes músicos.

El Búho – Bendito Dios, tuve la oportunidad de tocar para Carlos Santana en alguna ocasión. Fui secretario del Sindicato de Músicos en Chicago, y aquí en México he tocado mucho con un músico de aquí local que radica en Querétaro que se llama Arturo Ciprián Izquierdo y me contrató para tocar, de hecho grabe un par de discos con él.

Toque con un grupo de aquí que se llamaban Los Segamas que fue el mejor grupo de rock de San Luis pero con ellos toque en Chicago y grabé un disco con Huarachín y Huarachón en la Zona Rosa de México.

Acompañe a un cantante italiano en México, se llamaba Pasquale; excelente cantante. Y también a una cantante japonesa llamada Shati Towaba.

He sido bendecido con tocar con grandes músicos locales que ya se los llevó la vida como Martín Cosio, Mundo Acevedo, Aldo López, Fer Zamarrón y también he acompañado a cantantes como Karen Smith.

Fuerte Influencia en la Música Potosina

El guitarrista ha logrado influir de manera permanente en la música local, y eso le ha permitido colaborar con talentosos ejecutantes como Karina Colis, percusionista potosina que ha tocado en muchos países como la India, así como con Leonardo Prakash, ejecutante de citará, quien le dedicó una melodía en un su último disco.

Fotografias de Facebook Karina Colis y Leonardo Prakash

Al recordar a los muchos músicos con los que ha compartido escenarios, El Búho dijo que no pierde la ilusión de tocar para la gente: “tengo a mi hija también, y me da las fuerzas para seguir para adelante.

No todo son malas noticias

“No hay mal que por bien no venga”, comenta el guitarrista que fue entrevistado mientras tocaba en una de las bancas de pasaje Zaragoza, con una guitarra que le fue obsequiada por un músico que toca en la sinfónica local, quien lo llevó directamente la tienda y le compró una Squier Fender Stratocaster, le estoy muy agradecido.

Con alegría, comentó para Potosí News que una señora, a quien no conocía, lo llevó a comprar otro instrumento. En total, se ha podido comprar cuatro guitarras.

“Estoy muy agradecido con las personas que me dan su cariño y una moneda”.

Se le cuestionó sobre sus esperanzas para poder recuperar su histórica guitarra, después de un suspiro, nos platicó que lo considera muy difícil, ya que seguramente debieron asustar a la señora que le llamó para decirle que la tenía en su poder, que -posiblemente- le pudieron decir que la demandaría o algo similar.

“Yo, por el contrario, si un día me la regresara, para empezar, le daría 5 mil pesos por hacerme el favor de regresarme mi guitarra. Le he llorado mucho, era mi compañera de toda la vida y tenia 50 años con ella, a veces no podía ni dormir por estar pesando, obsesionado; comprendo que cuando me muera no me voy a llevar nada, espero que el que la tenga la disfrute como la disfrute yo”.

Instrumentos con valores invaluables.

Los precios de una guitarra usada de los años setenta, en especial por una Gibson Les Paul Custom oscilan entre los 89 mil y los 249 mil pesos de acuerdo a su estado, y se consideran instrumentos de colección.

Imágenes solo representativas

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