By La naturaleza nos ofrece una gran variedad de ingredientes con propiedades increíbles para cuidar nuestra piel.
El arroz y la maicena son dos ingredientes naturales con increíbles propiedades para el cuidado de la piel. Son económicos, fáciles de conseguir y no tienen efectos secundarios, lo que los convierte en una excelente alternativa a los productos comerciales. ¿Por qué ayudan a tener una piel hermosa y más lisa?
El arroz es rico en vitaminas B, E y minerales como el calcio y el potasio. Sus propiedades antioxidantes combaten los radicales libres, responsables del envejecimiento prematuro. Además, el arroz tiene un efecto astringente que ayuda a controlar la grasa y reducir el tamaño de los poros.
Cómo tener una piel sin líneas de expresión
La maicena es un almidón natural con propiedades absorbentes y emolientes. Suaviza la piel, reduce la inflamación y ayuda a eliminar las impurezas. También es un gran aliado para combatir el acné y las manchas en la piel.
Cómo hacer una mascarilla de arroz
Las mascarillas de arroz son un secreto ancestral de belleza que ha pasado de generación en generación. Las mujeres asiáticas las utilizan desde hace siglos para obtener una piel luminosa, suave y libre de imperfecciones. Estas recetas le vendrán muy bien a tu piel:
Piel más clara
En primer lugar, mezcla dos cucharadas de harina de arroz con una cucharada de yogur natural y una cucharadita de miel. Aplica sobre el rostro y deja actuar durante 20 minutos.
¡Adiós a las células muertas!
Lo que necesitas es mezclar dos cucharadas de maicena con una cucharada de aceite de oliva y una cucharadita de azúcar. Exfolia suavemente tu rostro con movimientos circulares.
Piel refrescante
Finalmente, hierve una taza de agua con dos cucharadas de arroz. Deja enfriar, cuela y aplica sobre el rostro con un algodón.
Además, toma en cuenta los siguientes consejos:
1. Limpieza: Lava tu rostro dos veces al día con un jabón suave y agua tibia.
2. Hidratación: Aplica crema hidratante facial dos veces al día, por la mañana y por la noche.
3. Exfoliación: Exfolia tu rostro 1-2 veces por semana para eliminar las células muertas.
4. Protección solar: Usa protector solar con FPS 30 o más todos los días, incluso en días nublados.
5. Alimentación saludable: Come frutas, verduras y alimentos ricos en antioxidantes.
6. Beber agua: Bebe suficiente agua durante el día para mantener la piel hidratada.
7. Dormir bien: Duerme al menos 7-8 horas cada noche para que tu piel se regenere.
8. Manejar el estrés: El estrés puede afectar negativamente la piel. Practica técnicas de relajación como yoga o meditación.
9. No fumar: Fumar daña la piel y acelera el envejecimiento.
10. Consultar un dermatólogo: Si tienes problemas de piel, consulta con un dermatólogo para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuado.
